noviembre 2018

Hoy en día el universo de las bodas está cambiando y son cada vez más las parejas que buscan nuevas y diferentes formas de celebrar su enlace para que éste sea único e irrepetible.

Todos estamos de acuerdo en que una boda es la celebración del amor entre dos personas que desean comenzar un proyecto de vida en común lleno de respeto, sacrificio y confianza (los ingredientes base, que no es poco, para una vida llena de amor), pero basta un solo detalle para salir de lo tradicional y convertir ese día en algo original para todos.

Porque, piénsalo, ¿cuando ha sido la última vez que has sido invitado a una boda protocolaria, como las de antes? Hemos ido cambiando las bodas clásicas por celebraciones personalizadas, muy “de los novios”, en las que los detalles son lo más importante: el lugar, la decoración, los vestidos de la novia, los calcetines del novio, la disposición de las mesas, la entrega del ramo, e incluso, el momento del “Sí, quiero”.

El momento del “Sí, quiero”… el más emocionante de toda la ceremonia. En la actualidad, muchas parejas buscan dar un toque personal a esa parte de la ceremonia para salir del clásico “en la salud y la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza”, escribiendo ellos mismos estos votos. Pero lo que uno no sabe es lo difícil que es enfrentarse a un folio en blanco para hablar sobre el amor hasta que se pone.

¿Qué son los votos matrimoniales? Son una declaración de amor del uno hacia el otro, la promesa que haces a tu pareja de amarlo y respetarlo “hasta que la muerte nos separe”. Por ello, en el momento en el que te pongas a escribir, lo primero que tienes que hacer es pensar en vuestra relación.

A pesar de haber tantas formas de personalizar los votos como parejas que van a casarse, si eres más clásico desde Wedding Green te presentamos las tres formas más convencionales de pronunciar tus votos.

Yo te quiero a ti…

– Novio: “Yo, Guillermo, te quiero a ti, Ana, como esposa y me entrego a ti, y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida”.

– Novia: “Yo, Ana, te quiero a ti, Guillermo, como esposo y me entrego a ti, y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida.

Yo te recibo…

– Novio: “Ana, ¿quieres ser mi mujer?”

– Novia: “Sí, quiero”

– Novia: “Guillermo, ¿quieres ser mi marido?”

– Novio: “Sí, quiero”.

– Novio: “Ana, yo te recibo como esposa y prometo amarte fielmente durante toda mi vida”.

– Novia: “Guillermo, yo te recibo como esposo y prometo amarte fielmente durante toda mi vida”.

Sí, quiero…

– Sacerdote: “Guillermo, ¿quieres recibir a Ana como esposa, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarle y respetarla todos los días de tu vida?”.

– Novio: “Sí, quiero”.

– Sacerdote: “Ana, ¿quieres recibir a Guillermo como esposo, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida?”.

– Novia: “Sí, quiero”.

– Sacerdote: “El Señor, que hizo nacer entre ustedes el amor, confirme este consentimiento mutuo que han manifestado ante la iglesia. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre”.

Si por el contrario, quieres que ese momento sea más personal, desde Wedding Green te aconsejamos cómo escribir unos votos emocionantes.

Los votos dependerán de cada historia y de cada pareja y sus experiencias, por ello, te sugerimos que empieces describiendo a tu pareja, sus virtudes, lo que te enamoró de ella. No olvides nunca vuestra primera cita, vuestra canción, y nunca, bajo ningún concepto, olvides lo que siempre os ha hecho especiales el uno para el otro.

Si eres de ese tipo de personas que viven la filosofía del menos es más, no te preocupes. Lo importante es conocer los sentimientos que uno siente por la otra persona, y el por qué quiere pasar el resto de su vida junto a ella. Un ejemplo claro de este tipo de votos lo encontramos en el cine, una buena fuente de inspiración, cuando Carrie Bradshaw lee a Mr. Big la carta que Beethoven escribió a su Amada Inmortal y que más tarde, él pronunciaría en una sencilla ceremonia: “Siempre tuyo, siempre mía, siempre nuestros”.

Si tras la ceremonia quieres seguir sorprendiendo a tus invitados, no olvides la importancia de elegir el espacio adecuado para tu boda.

Desde Wedding Green queremos ayudarte a celebrar la boda que deseas y por ello, nos adaptamos a tus necesidades, teniendo en cuenta la importancia de los detalles, ofreciéndote las mejores opciones para que tu boda sea inolvidable.

Gracias a la confianza de nuestros clientes, contamos con una larga experiencia en el sector nupcial. Durante todo este tiempo, Wedding Green ha organizado caterings para novios con perfiles muy distintos pero con algo en común: el deseo de que su boda tenga un toque diferencial. Nuestra respuesta ante esta demanda es la creatividad, calidad, rapidez y buena gastronomía para una evento muy especial.